Porque no hay casas a la venta?
Cualquiera persona que este buscado una casa recientemente sabe que no hay suficientes casas en venta.
Estas estadisticas demuestran la falta de casas en la actualidad:
En 2019, la nación tenía un suministro de 3.9 meses de casas existentes para venta. Eso significa que, al ritmo visto entonces, habría llevado menos de 4 meses para vender todas las casas en el mercado. En este tipo de escenario el suministro de menos de seis meses pone a los compradores de casas en desventaja.
“La demanda de casas para primeros compradores de casas es y seguira siendo muy fuerte en 2020”, escribió el economista senior de Realtor.com George Ratiu en su pronóstico. Pero espera que los compradores por primera vez tengan dificultades para encontrar viviendas economicas.
¿Cuales son las razones por los nuevos compradores especialmente los millennials y generacion X no tienen opciones para encontrar una vivienda? ¿Quién es responsable de la escasez de viviendas en venta y por qué? Se han identificado algunos sospechosos.
1. Los boomers no se moverán
Simplemente no hay muchos incentivos para que los boomers vendan sus casas, según el pronóstico 2020 de Realtor.com, en parte debido a la incertidumbre económica. Para que los millennials compren sus primeras casas, y para que los propietarios de la generación X se muden a sus próximas casas, los baby boomers tendrán que vender.
Pero las personas de todas las generaciones no se quieren mudar. El vendedor típico en 2019 fue propietario de la casa durante 10 años, mientras que los propietarios solían vender cada seis o siete años, dice Jessica Lautz, vicepresidenta de demografía y conocimientos de comportamiento de la Asociación Nacional de Agentes Inmobiliarios. La razón más comúnmente citada para vender en 2019 fue acercarse a amigos y familiares; en años anteriores, la razón principal para mudarse era cambiar de trabajo o mudarse a una casa de diferente tamaño para acomodar los cambios familiares.
“[Los baby boomers] han sido más lentos que las generaciones anteriores para vender la casa familiar, lo que exacerbó la escasez de casas en venta”, concluyó un informe de precios de Freddie Mac a fines de 2017.
2. Los propietarios no venderán
Millones de viviendas unifamiliares se convirtieron en alquileres después de la crisis de ejecución hipotecaria, dijo en 2017 Dennis Cisterna, director de inversiones de Lafayette Communities, un inversor institucional en viviendas de alquiler. “Esos inversores no tienen ningún incentivo para vender”, dice. Cuando una casa sale a la venta, “ahora estás compitiendo no solo con tu vecino que quiere comprar esa casa, también estás compitiendo con los inversores”.
Los inquilinos constituyeron el 35% de los hogares en el tercer trimestre de 2019, frente al 31% en 2005, según la Oficina del Censo.
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3. Los propietarios están enamorados con bajas tasas de interes en sus hipotecas
En los últimos tres años, la tasa de interés de las hipotecas promedió 3.9%, según el Departamento de Comercio. La gente saborea sus bajas tasas hipotecarias y no quiere renunciar a ellas.
Entonces, a medida que aumentan las tasas hipotecarias, los propietarios tienden a mantener sus casas un poco más de tiempo, dijo Frank Nothaft, economista jefe de CoreLogic, en un simposio de financiación de viviendas del Urban Institute a fines de 2017.
“Eso significa que es probable que el inventario de viviendas en venta, que ya es muy bajo, se mantenga así si vemos tasas de interés más altas”, dijo Nothaft.
4. Los constructores ignoran a los compradores de nivel de entrada
Durante los primeros 10 meses de 2019, se vendieron alrededor de 585,000 casas recién construidas, según la Oficina del Censo. El cincuenta y seis por ciento de esas casas cuestan $ 300,000 o más. “De las nuevas viviendas que estamos construyendo, la gran mayoría son productos de mudanza”, dice Cisterna. “Ya no son para el comprador de nivel de entrada”.
Los constructores responden que pagan $ 49,500 por un lote edificable típico a nivel nacional y casi tres veces más que en Nueva Inglaterra. Y dicen que se enfrentan a una escasez de mano de obra calificada porque los trabajadores experimentados abandonaron los oficios de la construcción durante la Gran Recesión, las personas más jóvenes no los reemplazan, muchos solicitantes de empleo no pueden pasar las pruebas de drogas y la aplicación de la ley de inmigración está asustando a algunos trabajadores lejos.
5. Las regulaciones para construir aumentan los costos
Los constructores de viviendas dicen que las regulaciones, incluidas la protección del medio ambiente, las tarifas de infraestructura y las reglas que especifican los tamaños mínimos de los lotes, agregan decenas de miles de dólares al costo de cada hogar. Las regulaciones representan aproximadamente una cuarta parte del costo de cada hogar, según Michael Neal, vicepresidente asistente de pronósticos y análisis de la Asociación Nacional de Constructores de Viviendas.
Un informe de inventario de Freddie Mac en 2017 había hecho un punto similar. “Las regulaciones de uso de la tierra se han vuelto más onerosas” en los últimos 30 años, lo que hace que su construcción sea más costosa, dijo. Freddie Mac descubrió que toma solo 3.5 meses obtener un permiso de construcción en Nueva Orleans indulgente, mientras que toma 17 meses obtener un permiso de construcción en Honolulu restrictivo. Un proceso de permisos más largo cuesta dinero ya que los desarrolladores llevan las inversiones en sus libros mientras esperan el permiso para construir.
6. Los propietarios quieren restringir el suministro
Las regulaciones locales de zonificación y uso de la tierra no están escritas por una mano oculta. Son promulgadas por funcionarios que fueron elegidos por el pueblo. Cuando los funcionarios de planificación y zonificación limitan la cantidad de casas que se pueden construir en un vecindario, o cuando establecen un mínimo de metros cuadrados para casas, están limitando el suministro de viviendas y haciendo
